Estimado lector, hay muchas buenas razones por las que debe mantenerse alejado de la pornografía. Si no lo haces, la pornografía atraerá a estos seis demonios a tu vida.
Ver porno es un gran pecado contra Dios. El Señor ve la pornografía como parte de la inmoralidad sexual. Ninguna persona sexualmente inmoral entrará al cielo (ver Apocalipsis 21:8). Solo el verdadero arrepentimiento a través de la sangre de Jesucristo puede quitar ese pecado.
Demonios de lujuria sexual.
Tan pronto como comiences a ver pornografía, el diablo enviará demonios de lujuria sexual a tu vida. Siempre sentirás que quieres estar en una relación sexual.
El demonio de la masturbación.
Cuando tus ojos entren en contacto con imágenes pornográficas, los demonios de la masturbación invadirán tu vida. Sentirás ganas de masturbarte todos los días.
Demonios que tendrán sexo contigo.
La mayoría de las imágenes pornográficas tienen un vínculo directo con el reino de Satanás. Mirar estas imágenes atraerá demonios que te agredirán sexualmente mientras duermes. Solo el arrepentimiento y la liberación pueden expulsar a estos demonios.
Demonios de la Confusión.
La pornografía traerá muchos demonios de confusión a tu vida.
Desgracias.
Ver porno puede traer muchas desgracias a tu vida. Estos incluyen la infertilidad, una vida sin matrimonio, el desempleo, la enfermedad, la pobreza y, finalmente, la muerte.
Demonios del infierno.
Tan pronto como empiezas a ver porno, firmas un trato con los demonios del infierno. Estos demonios siempre se acercarán a tu vida.
Hay una salida a la adicción a la pornografía.
Nuestro Padre Celestial puede ayudarte a superar la pornografía. Arrepiéntete de este pecado y pídele a Dios que te lave con la sangre de Jesucristo. Después de este arrepentimiento, el Padre Celestial te ayudará a vivir una nueva vida.
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