Estimado lector, puede que no lo crea, pero en realidad me pasó a mí. Estaba en gran peligro y no sabía qué hacer hasta que esta breve oración que hice comenzó una guerra en el cielo.
Este era el peligro.
Una vez, mi esposa y yo decidimos que necesitábamos una nueva colcha, así que pusimos este artículo en nuestra lista de compras del sábado.
Mientras íbamos de tienda en tienda, vimos en una de las tiendas una hermosa colcha envuelta en una bolsa de polietileno a la moda.
Querido hijo de Dios, a veces las cosas hermosas que ves en este mundo pueden no ser tan hermosas como crees.
El dueño de la tienda nos informó que esta colcha era la única que quedaba, y por eso la compramos sin demora.
Esta no era una colcha ordinaria.
Si hubiéramos usado nuestros ojos espirituales perspicaces, no deberíamos haber comprado esta colcha porque el dueño de la tienda estaba profundamente involucrado en el ocultismo y el satanismo.
Como está a punto de descubrir, esta no era una colcha común y corriente, y por esta razón aconsejo a todos los cristianos que siempre oren primero antes de comprar cualquier cosa.
Una pitón en nuestra cama.
La noche siguiente, después de que esta nueva colcha estuviera en nuestra cama, sucedió algo extraño. Mientras comenzaba a dormirme lentamente, el Señor iluminó mis ojos espirituales y vi algo en el mundo sobrenatural que me aterrorizó.
De repente vi una gran pitón apoyada encima de la colcha nueva, ¡y en unos segundos esta visión sobrenatural desapareció!
Salté de la cama aterrorizado preguntándome si lo que el Señor me había mostrado era real.
No le dije a mi esposa lo que vi por miedo a asustarla.
Dios confirma lo que había visto.
En la tercera noche, cuando estaba a punto de acostarme, el Señor volvió a transformar mi vista y pude ver el mundo sobrenatural.
Esta vez me di cuenta de que la pitón había hecho enormes espirales en el suelo de nuestro dormitorio. Abrió su boca de par en par queriendo tragarme comenzando por mis brazos que colgaban de mi cama.
Esta es la oración que hice.
Confirmé que efectivamente había una pitón espiritual en nuestro dormitorio, y rápidamente salté de la cama para librar una batalla espiritual a través de la oración.
La oración que dije fue así:
Está escrito en la Biblia que todo lo que atamos en la tierra será atado en el cielo.
En el Nombre de Jesucristo Te ato espíritu de pitón.
Guerra en el cielo.
Esta oración puede parecer simple, sin embargo, cuando oré, sucedió algo grandioso en los cielos. Los ángeles guerreros de Dios fueron activados, rápidamente fueron a los almacenes celestiales y agarraron las enormes cadenas celestiales.
Los ángeles comenzaron a dejar caer estas cadenas sobrenaturales en nuestro dormitorio. ¡Hubo una gran guerra espiritual en el cielo y en nuestro dormitorio!
Sin que nadie las tocara, estas cadenas comenzaron a funcionar por sí solas, como si estuvieran controladas a distancia por los ángeles del cielo.
Las cadenas comenzaron a atar a la enorme pitón con una fuerza poderosa hasta que quedó completamente impotente.
Esta pitón quería huir, pero las cadenas celestiales de Dios la sujetaban con fuerza contra el suelo.
Era como si mis ojos estuvieran viendo una película de ficción, pero esta era una batalla real en el reino sobrenatural.
La enorme pitón quedó reducida a algo pequeño.
Puede que no creas esta fuerza sobrenatural que fue usada por Dios nuestro Padre, Jesucristo y los ángeles de Dios.
Sin piedad las cadenas celestiales ataron y apretaron a la pitón gigante hasta que alcanzó el tamaño de una botella de agua.
El demonio pitón fue expulsado de nuestra casa.
En la cuarta noche, cuando estaba por dormir, el Espíritu Santo abrió mis ojos espirituales nuevamente y comencé a ver el mundo sobrenatural. Me di cuenta de que la pitón atada todavía estaba en nuestra habitación.
Así que le pregunté al Señor por qué esta serpiente atada todavía estaba en nuestro dormitorio.
Esto es lo que él me dijo:
Porque en tu oración ataste a la serpiente gigante,
pero tú no echaste fuera ese espíritu maligno.
Rápidamente me levanté de la cama y expulsé el espíritu maligno en el Nombre de Jesucristo. Se fue con tal fuerza que nuestra casa tembló violentamente.
Nunca más volvimos a ver ese espíritu pitón.
La conclusión.
El Señor me instruyó que les dijera a todos los cristianos que durante sus oraciones y guerras espirituales, siempre deben usar el arma sobrenatural que Jesucristo menciona en Mateo 18:18.
¡Esta breve oración inició una guerra en el Cielo!
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