Querido lector, si ya has recibido a Jesucristo como tu Señor y Salvador y haces lo que te digo, entonces podrás conquistar este mundo.
La bestia que llevamos dentro.
Cada persona tiene una bestia dentro de su cuerpo. Esta bestia se llama hambre y es como un león en nuestro cuerpo. Si un cristiano puede domar esta bestia llamada hambre, entonces esa persona podrá conquistar este mundo. Dios ha dado a muchos cristianos misiones que cumplir en la tierra, pero esta bestia les ha fallado.
Jesucristo derrotó a esta bestia.
De todas las personas que alguna vez han vivido en esta tierra, a nadie se le ha encomendado la tarea más difícil como a nuestro Señor Jesucristo. Nuestro Padre Celestial le encomendó la misión de salvar a todos los seres humanos del infierno al ser crucificado públicamente en la cruz.
Mientras nuestro Señor se preparaba para llevar a cabo esta misión, nuestro Padre Celestial primero le dijo lo siguiente:
Mi amado Hijo, antes de que intentes cumplir la misión que te he asignado. Primero debes vencer a la bestia que llevas dentro llamada hambre.
Nuestro Señor Jesucristo le mostró a nuestro Padre Celestial que Él puede vencer a esta bestia. Al principio, Jesús quería mostrarle a nuestro Padre que podía vencer el hambre en un día. Pasó un día entero sin comida ni agua. Luego cambió de opinión y se dijo:
Déjame demostrarle a mi Padre Celestial que realmente puedo vencer a esta bestia llamada hambre.
¡Nuestro Señor Jesucristo extendió el número de días sin comida ni agua a cuarenta días! (Lucas 4:2). Así fue como Jesucristo venció a la bestia que había dentro de él llamada hambre.
A partir de esta experiencia, nuestro Señor Jesucristo ya no pudo distraerse por el hambre. Esta bestia ya no podía reinar sobre Jesús. En cambio, Jesucristo fue quien gobernó sobre esta bestia. A partir de ese día, Satanás y los demonios tuvieron aún más miedo de nuestro Señor Jesucristo.
Empieza a reinar sobre esta bestia.
Querido lector, si ya has recibido a Jesucristo como tu Señor y Salvador y quieres vencer este mundo, comienza a mostrarle al Padre Celestial que puedes gobernar sobre la bestia que llevas dentro llamada hambre.
Necesitas mostrarle al Padre Celestial que el hambre nunca tendrá dominio sobre ti. En cambio, te conviertes en el gobernante del hambre. Puedes empezar saltándote una comida. Esto le mostrará al Padre Celestial que el hambre no gobierna tu vida. ¡Cuando hagas esto, Satanás y los demonios comenzarán a huir de ti!
Si vous parvenez à conquérir cela, vous pourrez alors conquérir le monde.