Por Makko Musagara
Ofrendas de la iglesia que molestan a Dios.
Estimado lector, así como Jesús se sentó en la iglesia frente al lugar donde se colocaron las ofrendas y observó a la multitud depositando su dinero en la tesorería del templo, Dios siempre está haciendo lo mismo, aunque la gente no lo vea. (Marcos 12:41). Es a partir de estas observaciones que la Palabra de Dios escrita dice que hay algunas ofrendas que molestan a Dios.
Regalos al presidente.
Oro para que algún día Dios le dé la oportunidad de visitar el almacén donde se guardan los obsequios de sus conciudadanos a su presidente. Estos obsequios le indicarán cuánto honor le dan las personas a su presidente.
Le sorprendería el valor de mercado de muchos de estos regalos. Algunos obsequios pueden alcanzar hasta un millón de dólares en el mercado abierto debido a los materiales preciosos de los que están hechos.
Ofrendas a Dios.
Después de visitar el almacén de regalos de su presidente, oro para que visite las salas de seguridad de muchas iglesias donde se guardan las ofrendas de las personas a Dios.
Te sorprendería lo despectivos que muchos cristianos tratan a Dios. Verá en su mayoría monedas antiguas de bajo valor y billetes de banco de menor denominación.
Si alguien intentara llevar este tipo de obsequios a su presidente, la seguridad presidencial ahuyentaría a esa persona de la presencia del presidente.
Lo que más molesta a Dios es que si los cristianos honran a sus semejantes con ofrendas tan preciosas, ¿por qué lo tratan con desprecio con monedas viejas y billetes de banco de menor denominación?
«8 Ustedes traen animales ciegos para el sacrificio, y piensan que no tiene nada de malo; sacrifican animales cojos o enfermos, y piensan que no tiene nada de malo. ¿Por qué no tratan de ofrecérselos a su gobernante? ¿Creen que estaría él contento con ustedes? ¿Se ganarían su favor? —dice el Señor Todopoderoso—.
9 »Ahora pues, traten de apaciguar a Dios para que se apiade de nosotros. ¿Creen que con esta clase de ofrendas se van a ganar su favor? —dice el Señor Todopoderoso—. (Malaquías 1: 8-9)
Arrepiéntanse con ofrendas valiosas.
Dios está llamando a todos los cristianos a que se arrepientan y comiencen a honrarlo con valiosas ofrendas de la Iglesia proporcionales a las bendiciones que han recibido de él. Cuando hagan esto, lo invocarán y él responderá con muchas bendiciones para sus vidas.
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