Querido lector, siempre tenga cuidado al presentar su diezmo a la iglesia. Nunca diezmes sin presentar una ofrenda a Dios.
Lo que dice la Biblia.
Primero, examinemos lo que dice la palabra escrita de Dios en la Biblia al respecto. Si lee Malaquías 3:8-9, comprenderá que Dios no solo se quejaba de los creyentes que robaban los diezmos. Nuestro Padre Celestial también se quejaba de sus ofrendas en la casa de Dios.
Escuche lo que dice la palabra de Dios:
8 »¿Acaso roba el ser humano a Dios? ¡Ustedes me están robando!
»Y todavía preguntan: “¿En qué te robamos?”.
»En los diezmos y en las ofrendas. 9 Ustedes —la nación entera—, están bajo gran maldición, pues es a mí a quien están robando.
Malaquías 3:8-9
Seremos juzgados según la palabra de Dios en la Biblia.
En segundo lugar, cuando Dios nos juzga, se basa en su palabra escrita en la Biblia. Por lo tanto, necesitamos estudiar cómo está escrita la palabra de Dios en la Biblia para evitar perecer en el infierno.
Dios habló tanto de los diezmos como de las ofrendas.
Por lo tanto, si analizamos con atención Malaquías 3:8-9, nos damos cuenta de que Dios no se refería solo a los diezmos, sino también a las ofrendas. Por esta razón, si Dios va a emitir algún juicio, no se basará solo en los diezmos, sino también en las ofrendas.
Es preferible presentar el diezmo y la ofrenda al mismo tiempo.
Dado todo lo anterior, y desde el punto de vista celestial, es preferible presentar el diezmo y la ofrenda al mismo tiempo, pero por separado (o en sobres separados). Si sigues este consejo, no recibirás ninguna condenación de nuestro Padre Celestial.
Todas las iglesias deben recolectar diezmos y ofrendas, pero por separado.
En relación con este asunto, varias iglesias realizan diversas colectas de sus congregaciones. Sin embargo, al cielo le importan menos la mayoría de estas colectas. Lo que más importa en el Reino de Dios son las ofrendas a Dios y los diezmos.
