Querido lector, el Señor nos reveló recientemente algo nuevo. Leer la Biblia es en realidad comer galletas celestiales
¿Qué sucedió exactamente?
Hace poco, viajaba en el autobús del personal y me ocurrió algo sobrenatural. En cuanto me acomodé en mi asiento para el viaje de una hora, comencé a leer la Biblia en mi celular.
A mitad del viaje, ¡la Biblia que estaba leyendo, junto con mi celular, desaparecieron sobrenaturalmente! ¡Pero estaba completamente despierto! Curiosamente, en lugar de la Biblia y mi celular, ¡vi un paquete de galletas celestiales cerca de mí! Una galleta cayó sola en mi boca y sabía tan dulce. Entonces desperté de esta extraña visión sobrenatural.
Leer la Biblia es como comer galletas celestiales.
A partir de esta experiencia, comprendí que el Señor quería enseñarnos algo nuevo. El Señor nos mostró que leer la Biblia es como comer galletas celestiales.
El Señor me pidió que lo confirmara con este versículo bíblico.
Poco después de esta experiencia, el Señor me pidió que comparara este mensaje con Ezequiel 3:1-3. ¡Qué coincidencia! De hecho, el rollo (la palabra escrita de Dios) sabía tan dulce como galletas celestiales.
Escuchen lo que dice la palabra escrita de Dios en Ezequiel 3:1-3:
3 Y me dijo: «Hijo de hombre, cómete este rollo escrito y luego ve a hablarle al pueblo de Israel».
2 Yo abrí la boca y él me hizo comer el rollo. 3 Luego me dijo: «Hijo de hombre, cómete el rollo que te estoy dando hasta que te sacies». Me lo comí y era tan dulce como la miel.
Conclusión.
