Cómo te disciplina Dios
Por Makko Musagara
Querido lector, si eres un verdadero hijo de Dios, debes saber que Dios te disciplina para mantenerte en el camino correcto para la vida eterna. En este post te muestro cómo Dios puede disciplinarte.
Un ejemplo
Un muy buen ejemplo de cómo Dios puede disciplinarlo se encuentra en el Libro de los Números. En el capítulo 22. Balac, rey de Moab, tuvo tanto miedo de las millas de israelitas que viajaban desde Egipto a la tierra prometida. Envió a Balaam un vidente como se indica en Números 22: 4-6:
4 Entonces dijeron los moabitas a los ancianos de Madián: «¡Esta muchedumbre barrerá con todo lo que hay a nuestro alrededor, como cuando el ganado barre con la hierba del campo!»
En aquel tiempo, Balac hijo de Zipor era rey de Moab, 5 así que mandó llamar a Balán hijo de Beor, quien vivía en Petor, a orillas del río Éufrates, en la tierra de los amavitas.[a] Balac mandó a decirle:
«Hay un pueblo que salió de Egipto, y que ahora cubre toda la tierra y ha venido a asentarse cerca de mí. 6 Te ruego que vengas y maldigas por mí a este pueblo, porque es más poderoso que yo. Tal vez así pueda yo vencerlos y echarlos fuera del país. Yo sé que a quien tú bendices, queda bendito, y a quien tú maldices, queda maldito».
Dios se le aparece a Balaam
Dios quería que su siervo Balaam caminara de la manera correcta. Quería salvarlo de perecer en el infierno. Dios le dijo a Balaam que no maldijera a los israelitas porque eran un pueblo bendecido.
Dios disciplina a Balaam
Dios estaba muy enojado porque Balaam estaba en un Moab donde estaban acampados los israelitas. Envió un ángel para bloquear su movimiento. A veces Dios te disciplina bloqueando tus movimientos o acciones que Él sabe que te meterán en problemas o que te enviarán al infierno.
Siempre ten cuidado con la disciplina de Dios
Mientras caminas con Dios, ten cuidado con esos incidentes que Dios está usando para disciplinarte. Cuando los identifique, arrodíllese y arrepiéntase. Pídale a Dios que lo guíe por el camino correcto y que lo proteja siempre de descender al Infierno.