Querido lector, las palabras que salen de tu boca te dificultarán o te facilitarán la entrada al cielo (ver Mateo 12:36-37).
En este artículo te doy algunas palabras que contribuyen a tu vida eterna.
Estas palabras simplificarán tu entrada al cielo.
«Lo siento»
Decir «Lo siento» trae sanación a la persona afectada y estas palabras te absolverán en el Día del Juicio. «Lo siento» evita que tú y la persona afectada bajéis a los infiernos.
«Me disculpo»
Cuando dices que «Me disculpo», quitas un gran obstáculo que habría impedido que tú y la persona afectada entraran al cielo.
Satanás pecó contra Dios, pero hasta el momento nunca se ha disculpado. Como resultado, el juicio ya se ha hecho y su destino final será el infierno.
«Yo estaba equivocado, tú tenías razón»
Admitir un error resuelve muchos problemas que habrían impedido que tú y la persona afectada entraran al cielo.
Es mejor perder el honor y la dignidad terrenales que terminar en el infierno.
«Yo soy responsable»
Salvas a muchas personas del castigo cuando dices «Yo soy el responsable». Esto es exactamente lo que hizo nuestro Señor Jesucristo.
Jesús era una persona de gran honor, pero se humilló a sí mismo hasta el nivel más bajo y aceptó la responsabilidad de todos nuestros pecados.
Jesús le dijo a nuestro Padre en el Cielo así:
Asumo la responsabilidad por los pecados de todas las personas en la tierra.
Acepta a todo pecador arrepentido que cree en mí.
Esa persona no se perderá, sino que tendrá vida eterna.
ver Juan 3:16
El resultado de humillarte a ti mismo.
Si te humillas, Dios nuestro Padre te exaltará.
Debido a que Jesucristo aceptó la responsabilidad por nuestros pecados, Dios nuestro Padre lo exaltó sobre todas las demás personas como se muestra en el siguiente versículo bíblico:
Por lo cual Dios también lo exaltó hasta lo sumo,y le confirió el nombre que es sobre todo nombre, para que al[a] nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en el cielo,
y en la tierra, y debajo de la tierra,
y toda lengua confiese que Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre.
Filipenses 2:9-11
Estas palabras simplificarán tu entrada en el cielo.