
Estimado lector, puede que le resulte difícil creer lo que le voy a decir, pero es la verdad. A pesar de que Sansón cometió errores pecaminosos y su vida terminó trágicamente, Dios lo perdonó y ahora es uno de los santos en el cielo.
Esta acción salvó a Sansón del Infierno.
Durante las últimas horas de su vida, Sansón hizo algo que salvó su vida de perecer en el infierno. Se acordó de Dios y se arrepintió desde lo más profundo de su corazón.
Sansón lloró en su corazón mientras suplicaba por la misericordia y el perdón de Dios. Se dio cuenta de que algunas de sus acciones habían sido pecaminosas y habían avergonzado el nombre de Dios.
Mientras continuaba llorando dentro de su corazón, Sansón le rogó a nuestro Padre Celestial que no permitiera que el diablo lo arrastrara al infierno.

Sansón se arrepintió de sus pecados.
Sansón rogó dolorosamente a Dios que lo lavara y borrara sus pecados para que su nombre apareciera nuevamente en el Libro de la Vida de Dios. Escucha cómo lloró Sansón:
Entonces Sansón oró al Señor:
«Oh Soberano Señor, acuérdate de mí.»
Jueces 16:28
Dios escuchó la oración de Sansón.
Los milagros de Dios nunca cesan. En este momento cuando Sansón estaba en su punto más grande de necesidad espiritual, nuestro Padre en el cielo escuchó su oración por misericordia.
Poco después de la oración de Sansón, ocurrieron dos milagros. Nuestro Padre en el cielo lavó todos los pecados de Sansón, y en segundo lugar, Dios le dio a Sansón la fuerza sobrenatural que necesitaba desesperadamente.
Sansón murió como un hombre perdonado.
Debido al arrepentimiento de Sansón y como resultado de la gran misericordia de Dios, Sansón murió como un hombre perdonado.
Sansón está en el cielo.
Puedo confirmar en este artículo que Sansón es uno de los santos que vive felizmente con Dios nuestro Padre, Jesucristo, el Espíritu Santo y otros santos en el cielo.
Advertencia de Dios para todos los cristianos.
Nuestro Padre en el cielo está advirtiendo a todos los cristianos que no esperen hasta el último minuto para arrepentirse y cambiar sus caminos pecaminosos.
Dios le dio a Sansón un raro favor divino y suficiente tiempo para arrepentirse, pero muchas veces Satanás y los demonios traen muerte súbita a los cristianos para que no tengan tiempo de arrepentirse.
En muchos casos, la muerte súbita lleva a un cristiano al infierno porque no hubo tiempo para el arrepentimiento.
«Arrepentíos ahora,
y cambiad vuestros caminos
entonces obtendrás mi favor para vida eterna»
dice el Señor.
Dios luego perdonó a Sansón.
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