Sueños.
Este es el método que más usa el Padre Celestial para advertir a las personas que están a punto de enfrentar un peligro. Recuerdo una noche cuando tuve un sueño inusual. En este sueño, vi dos ejércitos disparándose y yo estaba atrapado en medio del fuego.
Extrañamente en este sueño, a pesar de que se dispararon tantas balas, ninguna de ellas me alcanzó y me desperté de este sueño aterrador. Durante aproximadamente media hora me pregunté si me iban a disparar al día siguiente. Oré acerca de este sueño y dejé el asunto en manos de Dios.
Al día siguiente, mientras conducía desde mi lugar de trabajo, vehículos policiales perseguían a un automóvil conducido por ladrones. Los ladrones se detuvieron justo detrás de mi vehículo y se dieron a la fuga. Coches de policía de dos direcciones inmediatamente dispararon contra el coche de los ladrones y me encontré atrapado entre los disparos.
Afortunadamente, ninguna de las balas me alcanzó. Regresé a casa a salvo y recordé el sueño de advertencia que Dios me había dado la noche anterior.
Pensamientos e intuición.
Nuestro Padre Celestial usa nuestros pensamientos e intuiciones para advertirnos que algo malo está por suceder. Recuerdo una noche cuando de repente me desperté alrededor de las 2 am y me senté en mi cama. Entonces se me ocurrió la idea de revisar la ventana de la habitación de nuestros hijos.
Obedecí este pensamiento y fui a la habitación de los niños. Cuando descorrí la cortina, vi a un ladrón parado en medio de nuestro recinto. Encendí la alarma y todos los ladrones huyeron.
Averías.
No todas las averías son malas como puede pensar. A veces, Dios usa averías para evitar que nos movamos y así nos protege del peligro que se avecina.
Otra gente.
Dios puede usar a otras personas para advertirnos de un peligro inminente. Las personas más usadas por Dios son nuestros seguidores y los profetas de Dios. Por ejemplo, el profeta de Dios puede advertir a una persona contra cierto viaje. Esa persona podría estar en problemas si va en contra de este consejo.
Actividades que desvían su atención.
El Señor puede protegerte del peligro haciendo que algo distraiga tus movimientos o tu atención. He leído testimonios de personas cuya mudanza al World Trader Center en Nueva York fue misteriosamente desviada justo antes del 11 de septiembre. Dios salvó sus vidas con estos cambios milagrosos en el movimiento.
Retrasos.
No todos los retrasos son malos como podría pensar. A veces, el Padre Celestial usa las demoras para protegerte de un peligro inminente.
Reacción repentina.
Nuestro Padre celestial puede enviar a su ángel para hacerte reaccionar de repente. Por ejemplo, algo puede hacer que usted tire comida o bebida envenenada.
Por otro lado, una reacción repentina provocada por un ángel puede salvarte de un próximo accidente.
Así es como Dios te advierte del peligro que se avecina.