Querido lector, nuestro Padre Celestial odia el corazón orgulloso y castigará a cualquiera con este tipo de comportamiento como lo indica Proverbios 16:5. Este artículo comparte contigo 10 señales de orgullo de un cristiano.
La fuente del orgullo.
Como el Espíritu Santo es para nuestro Padre Celestial, así lo es el orgullo para Satanás. De hecho, el orgullo surge cuando el espíritu de Dios deja a alguien y luego el espíritu de Satanás entra en esa persona.
1. Admirar las cosas que son una abdominación para Dios.
Primero, el orgullo hace que uno estime aquellas cosas que son abominación a Dios como se indica en Proverbios 6:16-19. Algunas de las cosas que el Señor odia incluyen una mirada orgullosa [la actitud que hace que uno se sobreestime a sí mismo y menosprecie a los demás] y una lengua mentirosa.
También Dios aborrece las manos que derraman sangre inocente, el corazón que traza planes perversos y los pies que corren veloces hacia el mal. Además, a Dios no le agradan los testigos falsos que dicen mentiras [incluso verdades a medias] ni la persona que difunde discordia (rumores) entre hermanos.
2. Justificarse ante los demás.
Segundo, cuando intentas justificarte ante los demás, entonces el orgullo ya ha entrado en tu corazón como lo indica nuestro Señor Jesucristo en Lucas 16:15.
Él les dijo: «Ustedes se justifican ante la gente, pero Dios conoce sus corazones. Dense cuenta de que aquello que la gente tiene en gran estima es detestable delante de Dios.
Dios siempre quiere que nos convirtamos y nos humillemos como un niño pequeño.
3. Amarse a uno mismo.
El orgullo es ese espíritu maligno que nunca ama nada más que a sí mismo. Incluso cuando se da caridad, sólo se hace con la esperanza de promocionarse a uno mismo.
4. Autoconservación.
El orgullo sólo es consciente de las cosas que pertenecen a la autoconservación.
5. Un corazón alejado de Dios.
Una persona orgullosa adora a Dios con sus labios pero en realidad su corazón está muy lejos de nuestro Señor Jesucristo.
6. Autopromoción.
Una persona orgullosa siempre busca promocionarse. Nunca esperará a que Dios lo promueva.
7. Negarse a tomar la cruz.
El orgullo se opone a la instrucción que Jesús nos da de tomar la cruz y seguirlo.
8. Alardeando.
Todo lo que hace una persona orgullosa es buscar su propia gloria, bondad, fama, honor, alabanza y ganarse la atención de los demás.
9. Controlar a los demás.
Además, el orgullo siempre querrá que controles a los demás. Las personas orgullosas insisten en hacer las cosas a su manera, incluso cuando se trata de cuestiones pequeñas que se reducen a una elección personal.
En segundo lugar, se niegan a aceptar la culpa y siempre quieren ser el centro de atención. Lo más importante es que una persona orgullosa quiere ser el centro de atención independientemente de las circunstancias.
10. Exaltación.
Además, el orgullo siempre querrá que te exaltes por encima de quienes te rodean.
10 signos de orgullo en un cristiano.
